¿Estás buscando las claves para gestionar la marca personal en perfiles profesionales? Pues llegaste al “lugar” correcto. Aquí te explico los elementos que debes conocer.
La relevancia de aprender a gestionar una marca personal es clara en la actualidad. Ya no es un tema solo de empresas. Nuestra exposición en las redes sociales, por ejemplo, lo demandan.
Y es que con las nuevas tecnologías, muchas prácticas sociales están cambiando, por lo que cualquiera sea el área que dominemos, necesitamos gestionar la marca personal.
Para lograr el propósito de esta entrega, pon atención al siguiente contenido:
- ¿Qué es la marca personal?
- Claves para gestionar la marca personal:
- Conocerse bien
- Cuidar la imagen
- Humanizar la comunicación
- Aportar valor
- Comentarios de cierre.
Comienzo con una definición importante, la de marca personal.
¿Qué es la marca personal?
La marca es el conjunto de cualidades que nos distingue, lo que nos permite identificarnos y diferenciarnos. De hecho, debemos ser conscientes de que nuestra marca “está registrada” desde que nacemos.
La marca es algo inherente a las empresas y productos, pero también a las personas.
Y en el caso de que ejerzamos una profesión o seamos expertos en algo, tenemos una marca personal asociada a nuestro perfil profesional.
¡Ojo!, aun cuando no pensemos en la marca personal, esta existe y es totalmente independiente de que esté bien trabajada o no.
Considera esta declaración: “la marca personal es la huella que dejamos en los demás y el recuerdo que estos tienen de nosotros”. ¿Qué opinas?
Como sabes, en los últimos años se ha hecho relevante la necesidad de trabajar la marca personal, de manera particular, por la alta exposición que tenemos en las redes sociales.
A través de ellas proyectamos una imagen de nuestra personalidad, actitudes y valores, lo que nos emplaza a tener cuidado y a estar atento de lo que decimos y hacemos.
Eso es lo que se llama hacer personal branding, proceso con el que todo directivo, empresario, profesional… debería estar familiarizado.
El branding hace referencia a la creación de la marca y a la gestión de los elementos que contribuyen a su construcción y difusión.
En tal sentido, sin lugar a dudas debemos conocer los aspectos esenciales sobre la gestión de la imagen pública, la dirección y el protocolo, sobre todo en lo que respecta a perfiles profesionales.
Y es que el branding ayuda a ser más conocido en un sector profesional determinado, a ganar reconocimiento y visibilidad y, por extensión, a tener más y mejores clientes.
Claves para gestionar la marca personal
Clave 1: la necesidad de conocerse bien
Para trabajar la marca personal, es necesario definirla. Eso implica abordar tres planos: qué se dice, qué se hace y cuál debe ser la actitud.
Tener consciencia sobre uno/a mismo/a y de cuál es nuestro propósito, nos ayuda a construir lo demás. Es por ello que conviene hacerse preguntas básicas como las siguientes:
- ¿Quién soy?
- ¿Qué quiero hacer?
- ¿Cuáles son mis objetivos?
Otras preguntas, igualmente relevantes, son las siguientes:
- ¿Qué puedo ofrecer a los demás?
- ¿Qué valor puedo aportar?
- ¿Cuáles son mis valores?,
- ¿A quién me dirijo y cómo lo hago?
Ten en cuenta que cuando se tiene cierta notoriedad o algún tipo de responsabilidad, todo lo que publiques en redes sociales u otros medios digitales, queda registrado en la Web y será sometido a análisis.
Por lo tanto, conviene cuidar el mensaje (qué se dice, qué se hace y la actitud). Pero también, debemos cuidar el medio utilizado: el plano físico si el mensaje es presencial, el diseño web, el perfil en redes, etc.
Clave 2: la imagen importa, ¡y mucho!
La imagen que proyectemos debe ser, ante todo, profesional. Y no hablamos solo de la foto de perfil en redes, sino de la faceta pública en general.
En un evento, por ejemplo, conviene conocer el protocolo para ceñirse a él. Lejos de verlo como algo que constriñe, el protocolo se debe ver como una herramienta que ayuda, como una guía.
Observa que en un evento es importante conocer el protocolo, tanto como la estructura organizativa, los objetivos que persigue, los aspectos relacionados con la gestión y, en definitiva, todo lo que tenga que ver con su diseño y producción.
También es importante la relación con los medios de comunicación, y no solo con las redes sociales.
Ten en cuenta que la radio, la prensa y la televisión han encontrado extensiones en el podcasting, los blogs o YouTube, por citar algunos ejemplos; y es necesario construir relaciones positivas para la imagen de marca.
Hay un punto de especial importancia, que debemos conocer y saber gestionar: las crisis reputacionales.
Esto es clave no solo para empresas, sino para profesionales y autónomos.
Las empresas son cada vez más vulnerables a las crisis reputacionales; ¡las personas también!
Las crisis de reputación pueden poner en un brete o situación comprometida a la marca personal, por lo que conviene tener herramientas para una correcta gestión que minimice los efectos.
Conocer los tipos de crisis de reputación, evaluar los escenarios y elaborar un plan para superarlas, es fundamental. ¡Nunca desestimes este punto!
Clave 3: humanizar la comunicación
Es cierto que ofrecer una imagen profesional demuestra confianza y seriedad, pero eso no está reñido con la originalidad.
Debemos encontrar la manera de crear lazos con las personas, a fin de construir una comunidad sólida a la que podamos fidelizar.
Una imagen fría y distante transmite emociones “negativas”. Por tanto, debemos encontrar la manera de mostrarnos cercanos para favorecer la interacción y no dar sensación de ente inalcanzable.
Tiene mucho que ver con buscar un estilo propio para la marca, que se identifique con la persona o la empresa que la ostenta, y eso nos emplaza de nuevo al autoconocimiento.
Aunque se pretenda transmitir seriedad para la credibilidad, tiene que haber sitios para esos toques informales tan necesarios, desde un GIF en Twitter a emoticonos en una newsletter. ¡Eso sí!, con buen criterio y en función del destinatario.
En todo caso, más que buscar solo la humanización de la comunicación, también se debe perseguir una comunicación de impacto, para lo que conviene conocer herramientas como las siguientes:
- oratoria y técnicas para hablar en público;
- diseño de presentaciones con impacto;
- habilidades para escribir en blogs y en redes;
- competencias para gestionar las emociones de la audiencia, etc.
Clave 4: aportar valor como máxima
Sin duda, un perfil profesional que logra aportar valor tiene más posibilidad de erigirse ante los demás como un líder.
Un empresario, emprendedor o profesional debe ser especialista en su sector, para generar información relevante para la comunidad a la que se dirige.
Una comunidad que irá construyendo paso a paso, a partir del impacto que genere al comunicarse.
Si aplica buenas prácticas y las claves comentadas, en la medida en que avance… será visto, cada vez más, como un referente.
Eso sí, una voz autorizada logra serlo porque conoce bien su misión, visión y valores… Solo conociéndose podrá posicionarse.
Construir una imagen pública adecuada y saber proyectarla ante los demás, sea en eventos, medios tradicionales, medios en línea u otras vías, es fundamental para el éxito en los negocios.
Por eso es necesario profundizar en los elementos relacionados con la marca personal y tener herramientas para proyectarla y gestionar los riesgos.
Comentarios de cierre sobre gestionar la marca personal
Con esta lectura estarás de acuerdo en que la marca personal es un concepto fundamental. Consiste en considerarse a uno mismo como una marca con todo lo que esto conlleva o implica.
Además, la marca propia debe ser creada o elaborada, transmitida, protegida y mantenida con dos propósitos centrales: diferenciarse y conseguir mayor éxito profesional.
Por lo tanto, debemos observar con detenimiento los 4 elementos clave comentados, y en particular, tener presente que en la marca personal son esenciales tres acciones:
- Lo que decimos. Nuestra marca personal se refleja en todo aquello que publicamos.
- Lo que hacemos. La coherencia entre nuestros actos y lo que decimos es un pilar de la credibilidad (nos define).
- Nuestra actitud. El cómo decimos las cosas y cómo las hacemos es un factor determinante de la marca personal.
En fin, no me queda más que recomendarte reflexionar sobre este interesante tema.
La marca personal en perfiles profesionales no se puede dejar al azar. ¡Éxito en la construcción de tu marca!
Gracias por leernos.
¡Hasta la próxima!
